viernes, 30 de marzo de 2012

El Estado de Alarma durante la II República en la provincia de Cáceres

"DON MIGUEL FERRERO PARDO, Gobernador Civil de la Provincia de Cáceres.

HAGO SABER: Que decretado por el Gobierno de la República el Estado de Alarma en todo el territorio de la Nación con el arreglo al artículo 34 de la vigente Ley de Orden Público de 28 de julio de 1933, entran en vigor las facultades extraordinarias que a las autoridades Gubernativas conceden los preceptos contenidos en el Capítulo 3º y de las que haré uso con todo rigor para corregir inmediatamente cuantos actos u omisiones puedan atentar contra el orden público, y con objeto de que no pueda alegarse ignorancia por parte de los habitantes de esta provincia, he tenido a bien dictar las siguientes medidas que contribuyan a la paz y tranquilidad de todos los ciudadanos de la jurisdicción de mi mando [...]"

Bando declarando el Estado de Alarma en la provincia de Cáceres.
26 de abril de 1934.
Fuente: Archivo Histórico Municipal de Tornavacas.

Así comienza el Bando con el que el Gobernador Civil de la provincia de Cáceres, Dº Miguel Ferrero Pardo, declara el Estado de Alarma con fecha de 26 de abril del año 1934 para todo el territorio de su jurisdicción. El documento que se muestra fue remitido al Ayuntamiento de Tornavacas para que quedara enterado de tal noticia -y así la hiciera saber-, al igual que se envió a los demás municipios de la provincia cacereña.  Este documento, sin duda alguna, es una buena muestra de la constante situación conflictiva por la que atravesaba el país.

Sin obviar los destacados méritos y progresos -relativos a la educación, a los derechos civiles, políticos y sociales, por citar algunos casos- llevados a cabo durante el Primer Bienio republicano (1931-1933), la tónica durante gran parte de la II República fue la de una gran conflictividad social y política que aztotó a la gran totalidad de la geografía española. A mi juicio, son datos muy interesantes -y que se suelen obviar muy a menudo- el gran número de huelgas y revueltas que tuvieron lugar en este período histórico, un excelente índice para medir esa tensión existente.

Remitiéndonos a la magnífica base de datos elaborada por el INE (Instituto Nacional de Estadística), nos encontramos que para el año 1932 se CONVOCARON, a nivel nacional, un total de 681 huelgas en todas las ramas de la producción económica; cifra, que sin duda, es todo un termómetro para conocer la agitación social y la inestabilidad política que se vivía.  Es por esta situación por la que el Gobierno no dudaba en aplicar una normativa "extraordinaria" para controlar una, ya de por sí, incontrolada situación.

El Estado de Alarma reducía notablemente los derechos de asociación, la libertad de imprenta, los desplazamientos de personas por el territorio nacional, entre otros; es decir, una serie de derechos que hoy consideramos imprescindibles. Este "status" tenía su fuente jurídica en la Ley de Orden Público de 28 de Julio de 1933 -normativa marcadamente represiva y que estuvo en vigor incluso acabada la Guerra Civil y con Franco en el poder -.

Aparte de este Estado de Alarma (declarado 23 veces en cinco años), durante la II República también se aplicó el Estado de Prevención (en 21 ocasiones) y el Estado de Guerra (en 18). Nada más y nada menos. De estas dos excepcionalidades jurídicas, el Estado de Guerra fue incluso declarado al levantarse, en bloque, la Generalitat en desacuerdo con la decisión de tachar de inconstitucional el Estatut (decisión tomada por el gabinete radical-cedista) en octubre de 1934.


jueves, 29 de marzo de 2012

El "Impuesto de Guerra" a finales del S. XIX. Caso concreto

Hoy os traigo una curiosidad histórica que, en el día de hoy, me ha llamado la atención buceando entre los papeles del Archivo Histórico Municipal de Tornavacas (Cáceres).

La "curiosidad" en cuestión la he econtrado en uno de los centenares de Libros de Actas que guarda dicho Ayuntamiento. Concretamente, se trata de una de las actas de sesiones de dicho Ayuntamiento (1874).


 Fuente: Archivo Histórico Municipal del
Ayuntamiento de Tornavacas.


La peculiaridad de este documento estriba, sobre todo, en el sello de correos que se observa en el mismo. Dada que la situación de las arcas estatales era cercana a la bancarrota - el 28 de febrero de 1873 el déficit alcanzó los 428,6 millones de pesetas, cantidad superior a la riqueza tributaria española - y, en aquel momento, debían destinar gran cantidad de fondos para sufragar los gastos militares originados por la guerra (1872-1876, "Tercera Guerra Carlista"), por ello, el Estado, a través del servicio de correos, decidió aplicar este "Impuesto de Guerra" como medida para aliviar la maltrecha situación de las arcas.

Este impuesto era aplicado mediante sellos de 5 y 10 céntimos -de peseta- y afectaba "a todas las cartas o pliegos que circulen en la Península e islas adyacentes, así como las que se dirijan a las provincias españolas de Ultramar por medio de los buques – correo españoles…”.

A este libro de actas se le aplica dicho impuesto ya que, tras su redacción, debía ser enviado a un registro (al de Administración Pública, en este caso) para que quedara constancia de los acuerdos tomados en las sesiones.

Este tipo de impuesto se volvió a recuperar a raíz de la desastrosa situación económica que atravesaba el país durante los años 1898-1899 (Guerra de Cuba).

miércoles, 28 de marzo de 2012

El Carlismo más allá de la guerra

Mi entrada de hoy la quiero dedicar a un tema que, para la inmensa mayoría, es bastante desconocido -y lo digo con conocimiento de causa-. En la gran mayoría de los casos, el carlismo se relaciona únicamente con las acciones bélicas (que las hubo, y muchas, indudablemente), sin embargo, casi siempre se olvida lo referido a su vertiente organizativa dentro del plano político-institucional.

Este es un tema que trata, de manera más o menos profunda, Evarist Olcina en su libro (me remito a la anterior entrada). Es totalmente fascinante ver como, a la vez que se libraba combate, se establecieron una serie de instituciones paralelas al Estado "oficial", por así decirlo, que pretendían organizar el territorio que tenían bajo su control.

Si bien durante la Primera Guerra ya hubo intentos de crear una serie de instituciones (Juntas de Gobierno, Secretariados...), el peso y la importancia de éstas fue mucho más notable durante la última gran Guerra del S. XIX (1872-1876). Y dentro de este período, me parece interesante destacar, al menos, dos instituciones relevantes que se establecieron en la villa de Oñate (Oñati en euskera), centro geográfico de Euskal Herria. Personalmente, tengo una estrecha ligazón con dicho lugar, y todas las referencias son escasas para explicar su valor e importancia a lo largo de los siglos -ya dedicaré otra entrada a estos menesteres-. Sin duda, fue un núcleo con un gran peso en las diferentes carlistadas que tuvieron lugar durante el S. XIX.

La España carlista en 1873. Fuente

Por un lado, aquí se estableció en octubre de 1874 el  Real Tribunal Superior de Justicia, órgano encargado de los asuntos judiciales dentro de la estructura creada por el bando carlista. Como en muchos aspectos relacionados con este "Estado paralelo" al sistema liberal, gran cantidad de autores dudan de la eficacia y del funcionamiento del mismo. Lo que está claro que, enseguida, este Tribunal comenzó a funcionar tras su establecimiento y en el año 1875 ya "se despacharon 352 asuntos".

Por otra parte, del mismo modo que se estableció la anterior institución, también, durante este período, se puso en marcha la Universidad -ya había funcionado entre los años 1835-1839-. Un majestuoso edificio construido en la época del Renacimiento y que, a lo largo de su historia, ha servido como centro de referencia cultural hasta que fue clausurada -por desgracia- por las reformas llevadas a cabo tras la "normalización" liberal, quedándose esta zona sin una referencia universitaria de primer orden hasta la fundación, en Bilbao, de la Universidad de Deusto. En la actualidad, ha vuelto a recobrar un gran protagonismo al encontrarse allí el Instituto Internacional de Sociología Jurídica, centro de gran relevancia a nivel internacional.

Vista general de la Universidad

Fachada principal de la Universidad.
Foto de Serafín Aparicio -gran fotógrafo y mejor persona-

Y por si os interesan más aspectos...

El primer Estado Vasco (Para nada estoy de acuerdo con el título del artículo, todo hay que decirlo, pero sí explica, de manera breve, la existencia de estas instituciones aquí reseñadas, entre otras).

El Estado Carlista

La primera universidad carlista de Oñate, 1835-1839, de Juan Antonio Morales Arce.







sábado, 24 de marzo de 2012

Números digitalizados del periódico "Solidaridad Obrera"

Cuando, hace un par de semanas ya, navegando por Internet me encontré una noticia que hacía referencia a la digitalización de un enorme número de ejemplares del periódico Solidaridad Obrera, no pude contener mi ansia -estando en una de las clases del Máster- por ver este auténtico tesoro.


Portada de "Solidaridad Obrera", 1907.

Gracias a la labor de recopilación y digitalización llevada a cabo por el "Centre de Documentació Antiautoritari y Llibertari", hoy, podemos disfrutar de gran número de ejemplares (desde 1907 hasta 1925) de este periódico tan relevante dentro del panorama del S. XX en nuestro país. Sin lugar a dudas, tener a nuestra disposición vía Internet esta gran joya documental, es todo un lujo tanto para historiadores como para los interesados en el tema.

Y para acabar, os dejo con un fragmento que aparece en la portada de uno de sus números. El mismo tiene fecha de 19 de octubre de 1907:

"Dormido, el proletariado, sueña extasiado en inocentes venturas. Cerca de él está el opio que la clase dominante y astuta de la burguesía da al pueblo para abstraerle de sus realidades y de la mísera condición de su vida. Así olvidando su primitivo estado, alejándose de su verdadero concepto de explotado se entrega en aras de calmantes creencias e inocentes ideales...y entre promesas y visiones ...duerme, suerme inconsciente...
¡Pobre proletario! mientras él, aletargado por el opio vive abstraído de su ser humano, la burguesía, con el instinto propio de la serpiente, va chupando la sangre de sus venas, dejando en su cuerpo la anemia y la impotencia [...]".
 

Quizá estas palabras no nos suenen tan "extrañas" o "lejanas", por decirlo de alguna manera, 105 años después. Disfruten de estas joyas.



miércoles, 21 de marzo de 2012

"Retorno a la lealtad. El desafío carlista al Franquismo"

La entrada de hoy va dedicada a una obra imprescindible para conocer el papel del Carlismo a lo largo del régimen franquista: "Retorno a la lealtad. El desafío carlista al Franquismo", de Manuel Martorell y publicado por la editorial Actas en el año 2010. Además, resaltar que consiguió el primer puesto en el Premio Internacional de Historia del Carlismo, otorgado por la Fundación Luis Hernando de Larramendi.

Para muchos de los que leéis estas líneas, con total seguridad, ya os resultará chirriante el propio título de la obra. ¿El carlismo desafió al régimen franquista? ¿Pero los carlistas no apoyaron en todo momento al General Franco?, e incluso, los más despistados os preguntaréis, ¿quiénes son los carlistas?. Sin lugar a dudas, el papel de éstos durante el régimen franquista está totalmente tergiversado y, en la mayoría de las ocasiones, se realiza la lamentable relación "carlismo" = "franquismo".  Ese maldito "todo es lo mismo". Y, nada más lejos de la realidad, para el pesar de muchos, "Franco quiso borrar el carlismo de la faz de la tierra", como así lo atestiguan diversas decisiones tomadas por parte del régimen (la principal, a mi juicio, fue integrar -y con ello minimizar el radio de acción de la Comunión Tradicionalista- a los carlistas -sin consultar a sus bases- en la Falange mediante el Decreto de Unificación de 1937).




Sin duda alguna, se trata de un libro necesario para conocer un tema que, en la mayoría de las ocasiones, ha sido tergiversado hasta la saciedad. Un libro para desechar, de una vez por todas, esa burda y maniqueísta relación tan arraigada de meter en el mismo "saco" a carlistas y a falangistas. A fin de cuentas, un libro para dar el verdadero valor a un movimiento político y social que, verdaderamente, ha tenido un peso tremendamente espectacular en muchos capítulos de nuestra Historia Contemporánea.

Os dejo un artículo muy completo sobre la presentación del libro, que además aborda a grandes rasgos el contenido del mismo, que tuvo lugar en el Civivox de Pamplona. Invito a todo aquel que esté mínimamente interesado a dedicar unos minutos a leer el siguiente enlace.



lunes, 19 de marzo de 2012

19 de Marzo de 1812 - 19 de Marzo de 2012.

Hoy, como es de esperar, mi entrada versa sobre el Bicentenario de la Constitución de Cádiz (1812). Como es habitual en este tipo de efemérides tan señaladas, desde los medios de comunicación se produce un verdadero bombardeo de información sobre el hecho en concreto. Hoy, no iba a ser menos. Los principales protagonistas de la vida política de nuestro país, como viene marcado por el protocolo, han estado hoy en el Oratorio de San Felipe Neri, en la capital gaditana, realizando alabanzas y estableciendo similitudes, incluso, sobre lo que supuso "La Pepa" para la situación de nuestro país por aquel entonces y la situación actual -y la necesidad del "cambio"-. En fin, para gustos los colores, como se suele decir.



Sin querer entretenerme más con las interpretaciones de este hecho -y sus consecuencias-, os informo de un espacio que esta noche se dedicará a "La Pepa" en Canal Extremadura (23.15). Copio y pego de su página web.

"Este lunes, en Canal Extremadura TV, te ofrecemos "Torrero, anatomía de un liberal."

'La Pepa', la Constitución de Cádiz, cumple en 2012 doscientos años de vida.
Su nacimiento, marcado por una etapa difícil de la Historia de España, con el destierro de Fernando VII y la ocupación napoleónica, se debe también al trabajo y la colaboración de una generación de extremeños que fueron grandes figuras políticas de la época: Diego Muñoz Torrero, José María Calatrava, Manuel Mateo Luján, José Bartolomé Gallardo o Fernando Fernández Golfín, entre otros.

'Muñoz Torrero, anatomía de un liberal' es un retrato de esta época y de estos hombres, con la figura preeminente del sacerdote extremeño."


Además, este espacio contará con las intervenciones de historiadores (entre ellos, el Catedrático de Historia Contemporánea de la Unex, Juan García Pérez) que han estudiado la figura de Muñoz Torrero.


viernes, 16 de marzo de 2012

"Las cloacas de la Transición", de Luis Díez.

Hoy os traigo el último libro que acabo de leer: "Las cloacas de la Transición", obra del periodista Luis Díez (Ed. Espasa, 2011).

Sinceramente, cuando llegó a mis manos, pensé que iba a ser uno más de los tantos y tantos libros que se han escrito sobre un período convulso de nuestra Historia, tal y como lo fue la Transición de la Dictadura franquista al actual "sistema democrático". No obstante, a mi juicio, es un libro que desprende muchas verdades -incómodas, en la mayoría de los casos- sobre los hechos que se produjeron durante este período. Destaco el tercer capítulo, "El comienzo de la guerra sucia". En el se exponen los asesinatos cometidos por organizaciones (Batallón Vasco Español, por ejemplo) compuestas por sujetos de la más recalcitrante ultraderecha española y europea (caso de Jean Pierre Cherid) y amparados por el propio Gobierno, partidario de mantener, a toda costa, una guerra sucia en aquel momento delicado. Hecho, éste, que es bien visible en las diferentes acciones llevadas a cabo por estos pistoleros pagados por el Gobierno (asesinatos de Atocha, sucesos de Montejurra, etc.).


Sin duda, es un libro que saca a la luz todos estos hechos que muchas veces nos ocultan los medios "oficiales", los mismos que nos hacen ver y creer que la Transición española fue un proceso modélico y libre de tensiones en lo que respecta al respeto de los derechos humanos de muchos ciudadanos españoles.

Os dejo enlace a una breve descripción de la obra, así como una entrevista vía Youtube al autor de la misma.



miércoles, 14 de marzo de 2012

La magnífica obra pictórica de Augusto Ferrer Dalmau

Hoy os traigo una entrada que versa sobre el pintor catalán Augusto Ferrer Dalmau. Tuve el inmenso placer de conocer sus obras el año pasado. Desde el primer momento, quedé enamorado de la inmensa mayoría de ellas.


Cuadro del Maestro Pintor D. Augusto Ferrer Dalmau :"Oriamendi"


Según las críticas, es considerado uno de los mejores pintores de Batallas dentro del territorio nacional. Personalmente, destaco su serie dedicada a la pintura de tipo ecuestre-militar, y más concretamente, la serie de obras que versan a las Guerras Carlistas, auténticas joyas y valiosísimo testimonio para "transportarnos" a dicho período.

Os invito a conocer su obra. Disfrutad.

Links:

Arteclasic

Blog de noticias y actualidad sobre la obra de Ferrer Dalmau

Página en Facebook

A modo de presentación

Muy buenas a tod@s.

Como podéis ver, retomo este Blog que en un principio fue creado para una asignatura de libre elección que cursé durante mi Licenciatura, concretamente hace dos años.

El título del mismo, bajo mi punto de vista, habla por sí solo. No he encontrado una frase que defina mejor lo que es la Historia, ese campo muchas veces menospreciado y tachado de "inútil" por el hombre de la Sociedad del Conocimiento y de la (Des)Información.

La Historia, utilizando esta máxima de Cicerón, es "la maestra de la vida y testigo de los tiempos".  La Historia es todo lo que somos, ni más ni menos.

Espero que me acompañéis en esta andadura por la Historia.

Nos leemos.